Evita este error al elegir tu aire acondicionado: el cálculo de frigorías que nadie te explica
El error común al elegir un aire acondicionado
Comprar un aire acondicionado parece una tarea sencilla: basta con elegir una marca reconocida y asegurarse de que tenga suficiente potencia, ¿verdad? Error. Uno de los fallos más frecuentes al elegir un sistema de climatización es no calcular correctamente las frigorías necesarias para enfriar una habitación.
🔹 ¿Qué pasa si el equipo tiene poca potencia? No enfriará bien el espacio, trabajará a máxima capacidad todo el tiempo y consumirá más energía. Resultado: una temperatura incómoda y una factura de luz más alta.
🔹 ¿Y si tiene demasiada potencia? Enfriará rápido, pero el ciclo de encendido y apagado será muy corto, lo que genera un mayor desgaste del compresor y un gasto innecesario de energía.
Muchas personas compran un aire acondicionado basándose en opiniones o recomendaciones generales sin considerar las características específicas de su hogar. Pero cada habitación tiene necesidades diferentes, y factores como los metros cuadrados, la orientación y el aislamiento térmico influyen directamente en el rendimiento del equipo.
Por eso, antes de tomar una decisión, es esencial entender cómo calcular las frigorías adecuadas para tu espacio. En el siguiente apartado, te explicamos la fórmula exacta y los elementos clave que debes considerar para hacer una elección inteligente.
Cómo calcular las frigorías según los metros cuadrados y la orientación
Elegir un aire acondicionado con la potencia correcta no es complicado si conoces la fórmula adecuada. La clave está en calcular las frigorías necesarias según el tamaño de la habitación y otros factores clave como la orientación, la altura del techo y el aislamiento.
Fórmula básica para calcular frigorías
Una regla general utilizada en climatización es que se necesitan aproximadamente 100-120 frigorías por metro cuadrado. Es decir:
📌 Frigorías necesarias = m² de la habitación × 100-120
🔹 Ejemplo práctico: Para una habitación de 20 m², el cálculo sería:
➡ 20 m² × 100 frigorías = 2.000 frigorías
➡ 20 m² × 120 frigorías = 2.400 frigorías
Por lo tanto, lo ideal sería elegir un aire acondicionado con una capacidad entre 2.000 y 2.400 frigorías.
Factores que influyen en el cálculo
No todas las habitaciones requieren la misma cantidad de frigorías. Hay elementos que pueden aumentar o reducir la demanda de refrigeración:
✅ Orientación de la vivienda:
- Si la habitación está orientada al sur o al oeste, recibe más horas de sol, por lo que necesitará un 15-20% más de frigorías.
- Si está orientada al norte o al este, la demanda de refrigeración es menor.
✅ Altura del techo:
- La fórmula estándar se basa en techos de 2,5 metros de altura. Si tu techo es más alto, necesitas añadir un extra de frigorías.
✅ Aislamiento térmico:
- Ventanas grandes sin doble acristalamiento o paredes mal aisladas hacen que el calor entre con más facilidad, aumentando la necesidad de potencia.
✅ Número de personas en la habitación:
- Cada persona genera calor. En espacios con más de 2 personas habitualmente, se recomienda añadir 300-400 frigorías por persona extra.
Ejemplo real con todos los factores
Imagina que tienes un salón de 25 m², con techo alto (3 metros), orientación oeste y grandes ventanales sin persianas. Veamos cómo influye en el cálculo:
➡ Frigorías base: 25 m² × 100 = 2.500 frigorías
➡ Por techo alto (+10%): 2.500 × 1,1 = 2.750 frigorías
➡ Por orientación oeste (+15%): 2.750 × 1,15 = 3.162 frigorías
➡ Por ventanas grandes (+10%): 3.162 × 1,1 = 3.478 frigorías
🔹 Resultado: Para este salón, un aire acondicionado de 3.500 frigorías sería ideal.
Con estos cálculos, puedes asegurarte de que el equipo que elijas sea el adecuado para mantener una temperatura agradable sin gastar más energía de la necesaria.
Otros factores importantes al elegir tu aire acondicionado
Ya sabes cómo calcular las frigorías necesarias según el tamaño y las características de la habitación. Sin embargo, hay otros aspectos clave que debes tener en cuenta para asegurarte de que tu aire acondicionado sea eficiente, duradero y económico a largo plazo.
1. Eficiencia energética: el consumo sí importa
Fíjate en la etiqueta de eficiencia energética:
🔹 Etiqueta A++ o superior: Menor consumo, mayor ahorro en la factura de luz.
🔹 Etiqueta B o inferior: Más barato de entrada, pero menos eficiente a largo plazo.
💡 Consejo: Si quieres reducir aún más el gasto energético, elige un modelo con modo ECO y tecnología Inverter.
2. Tecnología Inverter vs. ON/OFF
✅ Inverter: Ahorra hasta un 40% de energía y reduce el desgaste del compresor.
❌ ON/OFF: Consume más porque se enciende y apaga constantemente.
🔹 ¿Cuál elegir? Los modelos Inverter son la mejor opción por su eficiencia y durabilidad.
3. Tipo de aire acondicionado según tus necesidades
📌 Split de pared: Silenciosos y eficientes.
📌 Aire acondicionado portátil: Fácil de mover, pero consume más energía.
📌 Multisplit: Permite climatizar varias habitaciones con una sola unidad exterior.
📌 Aire acondicionado por conductos: Ideal para viviendas grandes o reformas.
4. Nivel de ruido: un detalle importante
🔹 Menos de 25 dB: Ideal para dormitorios.
🔹 Entre 25 y 40 dB: Nivel normal para salones.
🔹 Más de 40 dB: Puede ser molesto.
💡 Truco: Los modelos Inverter suelen ser más silenciosos.
Conclusión: cómo elegir sin equivocarte
El error más común al elegir un aire acondicionado es no calcular correctamente las frigorías necesarias. Con la fórmula que te explicamos, puedes determinar la potencia adecuada y evitar problemas de rendimiento y consumo excesivo.
Además, optar por equipos eficientes (A++ o superior), con tecnología Inverter y adecuados a tus necesidades te garantizará confort y ahorro energético.
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